BULLYING

 
Es considerado en la actualidad un fenómeno Social en crecimiento.
Desde el punto de vista etimológico la palabra Bullyng proviene del Inglés, Bull: toro, Bully: matón. Se trata de un hostigamiento sistemático en el que una parte intenta dañar física y/o psicológicamente a la otra que no se defiende, por la existencia de un desequilibrio de poderes. Ya el Psicólogo Dan Olweus lo definía como un problema social en el año 1970.Es un fenómeno cada vez más frecuente en el ámbito Educativo, su crecimiento ha generado una alarma a nivel Mundial, fundamentalmente por las consecuencias graves que el fenómeno origina, tanto a nivel del agresor /es, como de la victima/s.
Existen diferentes estímulos mentales que afectan tanto al hostigador como a la victima, aunque de formas diferentes; vemos una alteración fisiológica de los circuitos cerebrales, consolidando por una parte, canales neuronales permanentes y al mismo tiempo una atrofia de los canales neuronales normales, en el ejercicio tanto de la agresión, como en la victimización. El resultado es bien claro, con la permanencia en el tiempo de estas conductas, el agresor se vuelve más agresivo y violento, mientras que en la victima la conducta de victimización se hace más intensa generando Fobia Social

Signos de Bullying:

Existen por lo menos tres tipos de actores, aunque en la realidad surgen lo que podríamos denominar sub tipos. Mencionaremos: el agresor, la Víctima y los actores Pasivos (presenciales), donde todos comparten la responsabilidad. Si bien el fenómeno se produce dariamente, no es fácil de detectar, pues existe una tendencia generalizada a ser ocultado por la totalidad de los actores, por diferentes causas. Los signos más evidentes que Padres y Maestros pueden detectar en la víctima son los siguientes: - Baja de rendimiento académico y deportivo - aislamiento y disfunción social - tartamudeo - pesadillas - falta de apetito - dolores de cabeza - resistencia para concurrir a estudiar - ropas dañadas y hematomas

Perfil del hostigador vs. perfil de la víctima

Perfil del hostigador:
 - violencia como modo habitual de relacionarse
- alta capacidad para el engaño y dominio
- escasa empatía
- ausencia de culpa y vergüenza
- razonamiento egocéntrico
- sentimientos de indiferencia y orgullo por su actitud
- carencia de lazos familiares sólidos
- desinterés en la escuela como institución
- ejercicio de liderazgo psicopático
Perfil de la víctima:
- débil, inseguro y tímido
- Bajo Autoconcepto
- baja autoestima
- sensación de culpa
- ansioso
- sensible
- miedoso
- tendencia al aislamiento
- sentimiento de ser diferente
- depresión
- factores de riesgo suicida

Autoestima

La autoestima es un conjunto de percepciones cognitivas emocionales (por tanto usualmente irracionales) que definen la actitud hacia uno mismo, es decir, la forma en que toda persona se percibe y se juzga. Se dice (como un secreto a voces) que todo trastorno de la conducta suele comportar de forma directa o indirecta un trastorno de la auto-estima, dado que en la esencia de todo trastorno está una distorsión cognitiva. Una auto-estima positiva constituye una condición básica para la estabilidad emocional, el equilibrio psicológico y en última instancia, la salud mental del individuo. Por el contrario una autoestima negativa es fuente permanente de dolor aunque mayoritariamente de infelicidad, siendo como antes comentábamos, una característica sistemáticamente asociada a gran parte de psicopatologías, en especial a los trastornos de ansiedad y depresivos. En esta síntesis podemos encontrar la forma de contra-argumentar las auto-críticas negativas, mejorar la percepción y comprensión de uno mismo y nuestra relación con los demás. Utilizando terapia con hipnosis clínica para mejorar la auto-concepción (auto-concepto), corregir distorsiones cognitivas, responder adecuadamente a la crítica y resolver los episodios patológicos que pudieran derivarse de todo ello, se evita que los trastornos se desplacen, recidiven o se transformen en otros de mayor importancia clínica.

HIPNOTERAPIA

Encontramos en la Hipnosis Clínica, la Técnica adecuada para poder solucionar la disfunción conductual de los principales actores.
- La hipnosis provee un aumento de la capacidad de procesamiento de la información en el hemisferio cerebral izquierdo en sujetos diestros (Gruzelier, 1991; Gruzelier y Warren, 1992). Como consecuencia el sujeto adquiere un manejo más amplio de la información verbal, encontrando mejorías en: control del aparato motriz del lenguaje; mejor comprensión de la lógica social; mejoría del pensamiento proposicional, es decir, en las fases de propuesta, análisis y utilización de la información; planeación, toma y ejecución de decisiones.
- Inhibición de las funciones anteriores cerebrales mayor en el lado izquierdo (Gruzelier, 1991; Gruzelier y Warren, 1992). Esto provee al sujeto de una reflexión de sí mismo acorde más con lo individual que con lo social.
- Aumento de la actividad posterior en el hemisferio cerebral derecho provocando la generación de imágenes visuales con un alto contenido emocional significativo. (Crawford, 1986).
- Incremento de la eficacia de la Terapia Cognitiva para la Depresión (Beck) cuando se usa la hipnosis como coadyuvante. Alladin & Alibhai (2007).
- La hipnosis incrementa la eficacia de un tratamiento cognitivo-comportamental para el estrés agudo (Bryant et al., 2005).
- Tras revisar la evidencia disponible sobre la hipnosis como coadyuvante a los tratamientos cognitivo-comportamentales, se concluye que es probablemente eficaz para incrementar su eficacia en el Tratamiento de la ansiedad. (Schoenberger 2000).
- Enfoque cognitivo del perdón para corregir distorsiones de la percepción emocional que generan sentimientos de culpa, rencor o rechazo y dificultan la re-estructuración. (American Psychological Association Books 2000).
El tratamiento desde la Hipnosis Clínica se apoya en el marco Teórico proporcionado por la Inteligencia Emocional y es abordado desde diferentes corrientes psicológicas.